miércoles, noviembre 28

Ética del Cuidado


El objeto del que hacer de enfermería es el cuidado de las personas. Dicho cuidado abarca no solo el aspecto corporal de los pacientes sino también la parte espiritual, de ahí que se habla de nuestra profesión y de los enfermeros como artífices del cuidado holistico de las personas.

Para que un profesional tenga tal capacidad debe desarrollar a lo largo de su formación y ejercicio profesional ciertas competencias. Consideramos que una de las más importantes para poder ejercer en pleno nuestra labor es el autoconocimiento.Es clave conocernos a nosotros mismos saber cuales son nuestras debilidades y fortalezas, nuestros principios y valores así como también los objetivos y metas que mueven nuestras vidas.

Este autoconocimiento y nuestros principios éticos serán una herramienta crucial cuando nos toque enfrentarnos a situaciones que quizás no serán fáciles de resolver a simple vista y debamos recurrir a nuestros pares para que nos orienten en busca de la mejor solución, pero ante todo siempre debemos tener presente que todos los seres humanos tenemos derechos como a la libertad de elección, a ser tratados con dignidad, respeto y ante todo el derecho a la vida.

Cuando realizamos cuidados es esencial conocer a nuestros pacientes, entablar una relación empatica, que le de confianza a las personas y confíen en nosotros aquellas necesidades que están insatisfechas, sus dudas, temores y todo aquello en que nosotras podamos intervenir directamente o gestionar para que sean atendidos.

Hoy en día hay una característica que identifica a muchos profesionales y trabajadores del área salud que es el mutismo. Por la empatia también pasa el sentir lo que el paciente pueda estar viviendo y lo mucho que nosotros podemos ayudar con una sonrisa, con un saludo amable, con la explicación de procedimiento o un tratamiento que muchas veces es motivo de angustia y ansiedad en ellos. Cosas tan sencillas que son parte de nuestra labor y que son tan valoradas y agradecidas por parte de los pacientes.

El cuidado no solo pasa por aliviar el dolor físico, ayudar en la convalecencia o realizar tecnicas. Abarca un todo, un todo que parte de lo espiritual, lo psicológico tanto en el paciente como en la familia que nosotros consideramos como un todo. Ellos confían en nosotros algo tan preciado como es la vida de un ser querido y es de esperar que nosotros entreguemos lo mejor aplicando el principio de justicia a todos por igual sin distinciones.

Importante es considerar la autonomía de las personas en todas las edades y en las condiciones de salud que ella se encuentre.La autonomía es un derecho de todos los seres humanos y debe ser respetado y aceptado. Cada persona tiene la libertad de escoger lo mejor para sí, nosotros como futuros enfermeros podemos ayudar a guiar, informar, pero nunca influenciar y mucho menos decidir por otros.

Como profesionales de la salud siempre debemos estar dispuestos a querer el bien del otro y evitar hacer el mal. Por muy ardua que sea nuestra jornada de trabajo o muchos sean nuestros problemas personales debemos sacarnos esa mochila tan pesada y manifestar la mejor disposición y ganas para atender a los pacientes de una manera integral y dar a cada uno de ellos lo mejor de nuestra atención.

La ética más que imponernos principios o el modo correcto de hacer las cosas, nos hace reflexionar y evaluar nuestro actuar .Nos guía por el camino por el cual podemos encontrar las mejores decisiones y acciones para nuestra vida y para la de nuestros pacientes que muchas veces esta a nuestro cuidado.

El camino no es fácil, y no por mucho que se lleve andado es menos complicado, pero gracias a ciencias como es la ética contamos con una gran herramienta que nos ayudara a tomar las mejores decisiones y realizar las mejores acciones tanto para nuestros pacientes así como también para nuestras vidas.